Sinopsis: En un mundo dictado por el orden moral y el tradicionalismo viven en el Revolutionary Road una pareja a la que todos consideran especial. Siendo así ven cómo la última oportunidad para demostrarse a ellos mismos que son especiales se desvanece y con ello muchas otras cosas, dad la bienvenida de nuevo a Kate y a Leo.
Crítica:"Somos especiales", por un momento he sentido la tentación y el dejarme llevar por mi fantasía; Revolutionary Road es la segunda parte de Titanic, sin que Leo muera en la primera. Pero eso no tiene nada de malo. Pero ayudaría, o estropearía no se cómo decirlo. Revolutionary Road es otra lección de la vida, en la película se empeñan en decirnos que la pareja, ellos son especiales y así nos lo muestran destácandolos sobre el resto de personajes y parejas (que sobreactúan en una sociedad que en verdad sí era sobreactuadora, ultramoralista, la americana de los sesenta), ellos son especiales, son especiales; pero nunca sabemos el porqué, lo intumos, pero no nos dan las razones suficientes, ¿porqué? pues para que cada uno de nosotros le apliquemos nuestro motivo por el cual en algún momento de nuestras vidas nos hayamos sentido, o mejor dicho, el mundo haya creído que eramos especiales; una pareja especial, cuando en realidad no lo éramos. Éramos cómo todos los demás. Vienvenidos a Revoultionary Road, el Boulevard de los sueños rotos.
Debo confesarlo, soy una mala persona: al ver las infidelidades de (el) no ha conseguido suscitarme más que la mala conciencia, he sentido la purga por la que pasa el personaje... en cuánto he visto la de ella, he estallado en cólera, en celos (tomése estallar por mover un poco el culo del asiento). ¿Pero què son ellas en la historia? Una parte más del hilo de la trama.
Sobreactuaciones, malditas sobreactuaciones, otra cosa; las escenas de sexo. Malditas escenas de sexo. Las dos cosas que acabo de exponer son una moneda con cara y cruz. Puntos fuertes o débiles de la película, según se mire. Pero la película tiene una armonía fantástica, es un vals de despedidas constantes, de trenes perdidos para una vida mejor, las dos infidelidades llegan justamente en el peor momento, en el momento menos indicado. En el momento justo para que la cosa coja un dramatismo de destino fatal digno de tragedia griega. Ella siempre limpiando, ordenando, él siempre fumando, haciendo nada. Y por supuesto el contrapunto, el matemático loco, el único cuerdo, el único "no sobreactuado" de la película. El toque de genialidad. También el final otro toque de genialidad.
Pero quiero ya terminar, y aquí está la gracia, la película me ha dado mucho, mucho más de que pensar, me ha estimulado en muchos sentidos y por ello me quito el sombrero ante Sam Mendes. Esímulo; de las 4 que llevo vistas la que más. Pero por encima de todo un mensaje por y para todos; cómo me dijo alguien especial, no dejemos de recordar esas tardes de cafès en las que de jóvenes ilusionados con la vida, cargados de todo, queríamos correr por algún camino revolucionario.
Por ello, mi juicio final termina en lo que sigue:
Puntuación: 8.0/10 (Puntuación IMBD: 7.8/10 con 23.963 votos)
Harvey Milk:
Puntuación: 7.0/10 (Puntuación IMBD: 8.0/10 con 23.963 votos)
The Reader:
Puntuación: 8.5/10 (Puntuación IMBD: 7.8/10 con 13.608 votos)
El Curioso Caso de Benjamin Button:
Puntuación: 8.7/10 (Puntuación IMBD: 8.3/10 con 55.000 votos)
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