martes, 7 de abril de 2009

Saben aquél que diu...

Eugenio, eu un genio. Ni más ni menos. Podemos empezar a conocer alguien de muchas formas, una de ellas es a través del humor, ¿cuantas veces nos hemos sentido totalmente incomprendidos en la risa? ¿cuántas veces nos hemos reído solos? yo constantemente. Podemos empezar a conocer una persona, e incluso determinar si más o menos los queremos a nuestro lado a través del humor. Recuerdo especialmente cuando fui a ver Scoop de Woody Allen, en un cine de Madrid, la sala no estaba muy llena, no sé cuánto exactamente, eso sí os aseguro que era el único que reía de toda la puñetera sala, vamos a pulmón abierto...

Por ello os digo que mi referente humorístico (y mi antigua fuente de chistes) es este hombre, cuyo hijo me ha acompañado des de la primaria (hace tiempo que nuestros caminos se separaron pero fuimos grandes amigos) y cuya presencia alta y oscura he presenciado y cuya muerte, por dentro y de segunda mano, he llorado. A pesar de que te mataras (merecidamente drogata, ¡que eras un drogata!) te seguiremos queriendo:

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